La estación de la NSA y la CIA de la embajada de Estados Unidos de Lima, el grupo de apoyo computo peruano que utiliza en secreto las armas HARRP, y la unidad especial de inteligencia encargada en Latinoamérica del Cuartel General de la CIA en Landgley, Virginia, EEUU. Arreglaron la reunión de García con Piñera, con el fin de manipular psicotrónicamente al presidente chileno, para encubrir el ataque satelital HARRP contra el sur de Chile, y mostrarlo como un cobarde por las ofensas y provocación de guerra, cuando los peruanos de apoyo de la NSA y la CIA de Lima celebraban haber provocado sismos en plena juramentación presidencial de Piñera en el Congreso chileno. Además, probar si se puede hacer fracasar a Chile en el enfrentamiento legal contra el Perú seguido ante la Corte de la Haya, por el espacio marítimo en controversia.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario