viernes, 21 de febrero de 2014

La CIA de Caracas y la CIA de Lima quieren derrocar al gobierno de Maduro



En febrero del 2014, la CIA de Caracas y la CIA de Lima dirigían una conspiración desestabilizadora para derrocar el gobierno de Maduro.

En el Perú, la CIA de Lima dirigía a los medios de comunicación para que muestren sus portadas a favor de Capriles (reconocido agente de influencia de la CIA de Caracas), cuyo potencial representalos grupos de poder venezolanos controlados por una de las salas secretas de computo satelital psicotrónico del cuartel general de la CIA de Estados Unidos.

En esos días, Ollanta a través de su gobierno emite un comunicado a favor de Capriles, traicionando al presidente Maduro de Venezuela, aparte que lo invita para realizar una reunión en Lima.

Detrás, de esta invitación están los planes de Ollanta con la CIA de Lima para pronunciarse contra Maduro, y así, seguir ejecutando la conspiración contra el presidente Maduro, cuyo objetivo es derrocarlo de la presidencia.

En Santiago, Piñera declaró ante los medios de comunicación que el triángulo terrestre es chileno. Y en Lima, Ollanta dice lo contrario, y viaja a Israel para firmar acuerdos de cooperación de Defensa y otros.

En los cables de la embajada de Estados Unidos de Santiago y Washington, se informa la declaración de Piñera relacionado con el triángulo terrestre entre Perú y Chile. Al mismo tiempo, la CIA de Lima tiene el contenido de los cables y filtra en secreto esta información a sus agentes.

La guerra climática entre Perú y Chile, clasificado sus operaciones de alto secreto, puede transformarse en una guerra convencional.

El 19 de febrero Barack Obama dice que va a invadir el mar de Venezuela con la complicidad de Perú, Colombia y Brasil.


El 20 de febrero, Ollanta le demuestra a Maduro ser el traidor a la revolución bolivariana, y estar de acuerdo con los planes de la CIA de Lima y la CIA de Caracas.

miércoles, 19 de febrero de 2014

La CIA de Lima atenta a los extranjeros

La CIA de Lima está atentando la vida de argentinos, chilenos, uruguayos, ecuatorianos, brasileros y venezolanos que están de pasada por Lima.

Les bloquean las labores y ventas que realizan los artesanos en la calle del centro de Lima, ya que no disponen de dinero para poder pagar locales o alquilar espacios en centros comerciales.

Los ingresos económicos que ganan producto de sus ventas son mínimas, y a veces no hay ventas, por lo que no hay dinero para poder pagar los gastos del consumo de alimentos y no hay dinero para poder pagar la renta de una habitación en el hotel más barato.

Peor aún, si hay una persecución discriminatoria en contra estas humildes, convirtiéndose en atentados contra sus derechos humanos, al ser golpeados e insultados por parte de la serenazgo y la policía, quienes son mandados por la CIA de Lima a través de agentes del gobierno, con actitudes de odio y desprecio hacia ellos, y como no pueden defenderse se sienten humillados de estos atentados.

Para encubrir el desprecio que tienen contra los artesanos, argumentan que el centro de Lima es un centro histórico, y por lo tanto, no dejan realizar el comercio ambulatorio, lo cual es absolutamente falso.

Últimamente los artesanos estuvieron alojados en la salida de un parque que queda a la espalda del Hotel Sheraton del centro de Lima, donde fueron desalojados inhumanamente, ingresando carros de la policía y de la serenazgo para impedir su ingreso.

Ante estos atentados hemos presentado solicitudes y quejas a la Municipalidad de Lima, las que fueron rechazadas y archivadas.

Este impedimento se ha convertido en una persecución hostigatoria hasta el extremo de que no les dejan vender sus trabajos en ninguna parte. Pero sin embargo, si son peruanos los que venden si los dejan.

Las agencias de inteligencia extranjera que observan por satélite estos atentados contra los extranjeros en Lima no pueden decir nada porque la CIA de Lima los impide.